Las Furias en la pintura barroca

Profundización
Impartido por: Dra. D.ª María del Val Gago Saldaña

Las Furias (Erinias o Euménides en la nomenclatura griega), terribles deidades vengadoras, castigaban todas las ofensas contra la sociedad y la naturaleza, como el perjurio, la violación del deber de hospitalidad y, sobre todo, los crímenes contra la familia, hostigando al homicida hasta hacerlo enloquecer.

Desde el siglo XVI se conoció con este nombre a los cuatro personajes retratados por Tiziano para Carlos V que sufrieron horribles castigos en el Hades por haberse atrevido a desafiar a los dioses: Tántalo, Ticio, Ixión y Sísifo. El tema de las Furias se convirtió en un motivo iconográfico muy fecundo que adquirió una clara significación política, como una advertencia para quien osara desafiar al poder establecido.

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1 opinion

  • Fernando Rodriguez Moraga dice:
    10 de febrero de 2023 a las 17:39

    Que maravilla de conferencia!!!!
    Que bien explicada y complementada con las pinturas, cuanto detalle y erudición en la explicación del mito y su traslación a la pintura donde se refleja gráficamente.

    Cuidado con la Hybris!!!!, como le paso a Tántalo, incauto humano, robador de néctar y divina ambrosia y charlatán presuntuoso de conversaciones de los Olímpicos banquetes.
    Sacrificio humano y antropofagia divina, con su hijo Pélope, ganador en Olimpia de la mano de Hipodamía, héroe epónimo del Peloponeso, una vez que lo reconstruye Zeus, claro.
    Sorprende la interpretación del mito de la muerte de Pélope a manos de su padre Tántalo para dárselo a comer a los dioses en un banquete, y solo Deméter come un trozo de su hombro, para justificar la posible existencia de sacrificios humanos a los dioses y mas concretamente en rituales que tenían que con ver con los ciclos agrarios y las cosechas, por eso solo come la Diosa de la Agricultura.
    Por esa barbaridad Tántalo, será condenado en el Tártaro a pasar eterna sed y hambre, estando tan cerca de la comida y de la bebida.

    Flirtear con la mismisima Hera en el Olimpo y delante del todopoderoso Zeus, ¿Cómo te atreves Ixión? . Hera se lo cuenta a su marido y te engaña con un «fantasma» de Hera, una nube «igualita que ella», Néfele, yaces con la nube y nace el primer Centauro, y por ese acto de «soberbia», de Hybris, engañar al todopoderoso, Zeus te condena a rodar y rodar atado a una rueda incandescente en el Tártaro por toda la eternidad.

    Sisifo, mi favorito, eres un Crack!!!!, como tu descendiente, el Laértida, eres «fecundo en ardides», cuando vas a morir, engañas a la misma muerte, encadenas a Thanatos, y ya no puede hacer su trabajo, nadie se muere, se altera el orden y eso a los dieses no les gusta, una vez liberada la muerte por Ares llegas al Hades, y vuelves a engañar al mismismo señor del inframundo, que CracK!!!, que si tu mujer no te había rendido los cultos fúnebres y Hades se lo cree y te deja salir. Hasta que al final el mismísimo Hermes te lleva al Hades y los dioses te castigan a subir eternamente un pedrusco hasta lo alto de una montaña y cuando parece que llegas a la cima, vaya…se te cae rodando y otra vez a empezar.

    Ticio, a quien se le ocurre violentar a la divina Leto, madre de los flechadores gemelos, pues ya sabes al mismísimo Tartaro y que un buitre te coma el hígado, vaya!!! igual que al Japetonida Prometeo, pero hoy he aprendido de la profesora Saldaña como distinguiros, tu Tucio estas en el Hades, y el Titan está encadenado al aire libre en el Cáucaso, y junto a el suele aparecer una antorcha luminosa. Ya sabes de su filantropía, no?

    Sigo aprendiendo y disfrutando.

    Salu2 desde Mérida.

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